A pesar de la insistencia de los vecinos y empresas localizadas en la zona, la concesión encargada de la vía ha hecho caso omiso y por ese mínimo detalle, más el exceso de velocidad, descuido o microsueños, se han registrado muchos accidentes de tránsito en la glorieta de Las Flores.

El reclamo es instalar, así como existen en los peajes, resaltos o reducidores de velocidad, para que el conductor esté alerta y sepa que implica dejar de conducir raudo, orientarse mejor y seguir y atender las señales de tránsito.

Según las estadísticas, en la rotonda ubicada en el barrio Las Flores de Barranquilla se ha registrado múltiples accidentes de tránsito en lo corrido del año, tres de ellos en los últimos dos meses. 

Zona Cero dio a conocer en días pasados videos de cámaras de seguridad que revelaban los siniestros que ocurrieron el 25 de julio, 18 de agosto y 3 de septiembre. 

Uno de los accidentes más recientes ocurrió el pasado 25 de julio al chocar un automóvil contra las barandas de protección del separador vial.

El segundo accidente en el lugar se presentó el 18 de agosto, cuando un vehículo, de placas WOV977, de color blanco terminara accidentándose. 

El tercer suceso vial se registró el 3 de septiembre, luego de que un automóvil de placas LWQ046, que se movilizaba a alta velocidad por la rotonda, terminara estrellándose contra las barandas.

 A raíz de la accidentalidad en la rotonda, Zona Cero consultó con el experto en movilidad Isidro Ruiz Estrada, quien explicó las razones por las cuales se estarían registrando estos sucesos viales. 

“Lo primero que debemos tener claro es que esa rotonda ya cumplió su vida útil. De pronto se proyectó una glorieta con un diámetro para las necesidades de ese momento, cuando Barranquilla no tenía tanto tráfico en esa zona, cuando no había desarrollos urbanísticos como toda la parte de Mallorquín y Villa Campestre. Antes no estaba La Circunvalar de la Prosperidad que empalma con  la Vía 40. Las empresas que están ubicadas en el sector no tenían ese crecimiento que tienen ahora”, explicó. 

Precisó que cuando habla de “que la glorieta ya tiene su vida agotada” se refiere a que “en ingeniería todo se diseña para un periodo dependiendo de las necesidades de ese momento”.

Añadió que se proyectan unos años para que esa infraestructura siga cumpliendo su objetivo o su función y asegura que ese objetivo ya lo cumplió la glorieta y por eso hay horas de congestión y accidentes de tránsito. 

“Esa glorieta ya cumplió su vida útil, se quedó chiquita como lo diríamos en términos coloquiales”. 

Hay que señalar que la rotonda ubicada en el barrio Las Flores fue construida en 2009.

La glorieta, explicó el experto en movilidad, recibe el tráfico de tres brazos, un brazo que viene de la Vía 40, otro brazo que viene desde La Circunvalar de la Prosperidad, ruta utilizada por muchas personas que viven en el norte o que vienen desde el sur para salir a Cartagena, para salir a los municipios del Atlántico que están sobre la Vía Mar, para ir a Villa Campestre e ir a todas las zonas de Puerto Colombia; y el otro brazo es el de La Circunvalar, la cual en 2005 sólo tenía una calzada y ahora tiene dos. 

Isidro Ruiz aseguró que la rotonda de Las Flores le quedó pequeña al sector, a las empresas del sector que también crecieron y a los edificios cercanos. 

“Toda esa dinámica de urbanismo hace que haya más tráfico. Entonces cuando hay más tráfico la infraestructura se va rezagando. En este momento la glorieta está pequeña. Lo otro es que es una glorieta diseñada con especificaciones técnicas muy pobres, es decir, se hizo una glorieta para unas velocidades muy bajas. Barranquilla lamentablemente tiene una debilidad en el diseño de la infraestructura vial. Los diseñadores viales o los que hacen los diseños viales de Barranquilla parece que no conocieran la curva cuando están diseñando”, dijo Ruiz,

Agregó que “en los programas de diseño, en el caso de vías, existen herramientas para definir la curva. De pronto la curva sí la definen en el diseño, pero cuando la van a construir hacen una serie de tramos rectos. Si usted mira una glorieta aquí en Barranquilla, la glorieta no es un círculo en bordillo que lo define, sino que son tramos rectos muy cortos y eso hace que el giro de los vehículos sea forzado”. 

Isidro Ruiz Estrada explicó que un conductor cuando entra a una infraestructura que tiene definida la curva en el bordillo de la construcción, hace que la conducción sea suave, pero si son tramos rectos entonces la conducción no es suave y si se coge esa curva formada por tramos rectos a una velocidad alta, lógicamente que se tiene que estrellar el vehículo.

“Creo que lo que está pasando en la rotonda del barrio Las Flores es que tiene una curva formada por tramos rectos y cuando los conductores pasan por allí a altas velocidades, terminan estrellándose en ese lugar”.

Otro de los errores constructivos, según el experto en movilidad, tiene que ver con la zanja que tiene la rotonda, la cual “no debería existir”, sino una “cuneta suave” para evitar que el vehículo se caiga allí. Para ellos sugirió cubrir la zanja para que el conductor, si pierde el control del vehículo, no se vaya dentro de ese hueco. Aunque aseguró que lo ideal es que no exista dicha zanja.  

Para Isidro Ruiz Estrada, la glorieta tendría tres causas que estarían generando los accidentes: una tiene que ver con quedó pequeña, dos, las velocidades a las que están circulando los vehículos superan la velocidad de diseño de la rotonda y tres, que tiene un diseño pobre en los accesos a la rotonda.

“Yo creo que esa glorieta quedó muy pequeña, no fue diseñada para andar a más de 40 kilómetros por hora, es muy chiquita. El pavimento está en mal estado. Cuando se diseña una glorieta, los brazos que llegan a la glorieta tienen unos ángulos, estos ángulos también están distorsionados. Es decir, tú no puedes girar porque casi que te encuentras de frente con la glorieta. Si vienes desde la vía 40 o si vas entrando desde La Circunvalar de la Propiedad hacia la glorieta, eso genera una serie de perturbaciones en el conductor. Y si es un conductor inexperto y va cogiendo esa glorieta a velocidad, se estrella contra la glorieta y te metes en la zanja, que son los tres casos que se han registrado estos dos últimos meses”.  

Las recientes colisiones en el sector han abierto el debate sobre posibles soluciones inmediatas. 

Algunos ciudadanos han propuesto instalar señalización más visible, avisos preventivos, líneas sonoras en el pavimento e incluso cámaras de velocidad. Sin embargo, Isidro Ruiz asegura que la naturaleza del problema no radica tanto en la velocidad.

“El tramo que conecta la Circunvalar de la Prosperidad con la glorieta es de baja velocidad, con varios reductores en ambos costados. Lo que puede estar ocurriendo es que quienes vienen de la Circunvalar entran a la intersección a una velocidad más alta de lo recomendado. Una alternativa sería ubicar resaltos justo antes del empalme con la glorieta, para obligar a reducir la marcha. El problema es que esto haría aún más lento el tráfico y aumentaría la congestión en horas pico. Entonces esa no es la solución”, señaló.

Explicó que las soluciones tienen que ser adaptables a la condición, pero que no se perjudique la movilidad. 

Entre las posibles soluciones referidas por Isidro está la reconstrucción y ampliación de la rotonda, “algo muy difícil porque tendrían que comprar espacio y tumbar varias viviendas del sector". 

“Tendrían que tumbar las casas que están del lado de Las Flores y creo que en la otra esquina hay un espacio que es libre, pero yo no sé si eso sea espacio público. Hay unas casas, hay un parque industrial allí, unas bodegas, del otro lado está la estación de combustible. Eso ya es complicado y si por ejemplo algún día se crece más el barrio Las Flores y se amplía la zona industrial, definitivamente tienen que hacer un paso por arriba que venga de la Vía 40 y cruce a la circunvalar de la Prosperidad para evadir la glorieta y que el tráfico que vaya de largo, pase por arriba y que la glorieta sea local. Allí se podría aliviar el tema”, concluyó Isidro Ruiz, experto en movilidad.